En pleno siglo XXI, en donde todo se mide en tecnología, pantallas y comunicaciones, es difícil imaginar un castillo medieval en medio de Buenos Aires.

Sin embargo, existe La Candelaria, una estancia ubicada a 113 kilómetros de Capital Federal que en su terreno guarda un imponente y bello castillo francés que data del siglo XIX. Con actividades basadas en el ecoturismo, la particular estructura ofrece una oportunidad única para desconectarse y aprovechar al máximo el entorno natural.

El diseño paisajístico de sus 100 hectáreas fue obra del famoso urbanista francés Carlos Thays, quien propuso la siembra de araucarias, palmeras y cipreses, con el acompañamiento de puentes, estatuas y glorietas.

Todos los caminos de los bosques que rodean al castillo desembocan en el parque principal, un enorme espacio que permite la práctica de cabalgatas, deportes, pileta o, simplemente, un descanso al aire libre.

En tanto, hay algo en su historia que vale la pena destacar. Las tierras fueron adquiridas y ocupadas inicialmente por Don Orestes Piñeiro y Candelaria del Mármol, en 1840. A los pocos años, Piñeiro optó por renombrar todo el lugar como La Candelaria, en honor a su esposa.

Durante el transcurso del tiempo, ambos se percataron de su imposibilidad de tener hijos, por lo que Don Orestes culpó al cambio de nombre como una maldición. Bajo estas circunstancias adoptaron a Rebecca.

Rebecca, ya de adulta, viajó de luna de miel a Europa con Don Manuel Draga y, al regresar, volcó toda su inspiración en un objetivo: construir un castillo a imagen de uno que lo había impactado a orillas del río Loire, en Francia.

Así, la familia contrató al célebre arquitector Alberto Favre que, con materiales exclusivamente traidos del viejo continente, concluyó su majestuosa obra al cabo de cinco años, en 1894.

El castillo es impresionante por donde se lo mire. Tanto, que fue elegido como descanso para importantes figuras internacionales, como el caso del actor Tommy Lee Jones, los hijos de Madonna, Los Rolling Stones, Máxima y Guillermo, entre otros.

Foto: La Candelaria